
En su calidad de presidente ejecutivo del Forsur, señaló que de este total 170 millones de soles se han invertido en 209 obras ya culminadas, y que actualmente hay 423 proyectos en ejecución que demandan un monto de 456 millones de soles.
El titular de Vivienda dio estas declaraciones tras sostener una reunión de trabajo con los coordinadores del Forsur, así como con los responsables de las entidades técnicas provinciales de Cañete, Yauyos, Chincha y Pisco, a quienes les exigió que pongan más empeño en su labor para que las obras que se ejecutan en toda la zona afectada por el sismo de 2007 se culminen con celeridad y transparencia.
“El Forsur recibe del Gobierno del presidente Alan García los fondos necesarios para las obras. Pero estos fondos son transferidos a los gobiernos regionales, provinciales y distritales, así como a las empresas de saneamiento para que realicen las obras de reconstrucción. Vamos a ser más exigentes en la supervisión de las obras para que se culminen en los plazos previstos”, dijo Sarmiento.
El presidente ejecutivo del Forsur adelantó que en los próximos días se van a realizar 379 nuevos proyectos con una inversión de 147 millones de soles, para lo cual ya se está transfiriendo un adelanto de 95 millones de soles.
Tras la reunión con los coordinadores del Forsur, el titular de Vivienda inspeccionó las obras que se realizan en el Instituto Superior Tecnológico Cañete, en el distrito de Quilmaná.
En este lugar, la directora y el personal docente de dicho instituto le agradecieron por la construcción de la nueva y moderna infraestructura, que albergará a cerca de 700 jóvenes de 10 distritos de la zona y les permitirá estudiar carreras técnicas.
Luego, el ministro inspeccionó las obras de reconstrucción que se realizan en el colegio José Olaya, en el distrito de Cerro Azul, el mismo que debe quedar listo la primera semana de marzo para permitir que más de 500 alumnos inicien sus clases escolares con normalidad.
La alcaldesa de Cerro Azul le solicitó a Sarmiento Soto apoyo para demoler las aulas dañadas por el sismo y permitir un ambiente más amplio y seguro para los alumnos.